lunes, 4 de junio de 2012

Niña

La niña lloraba cada noche por un amor perdido, su almohada se teñía en lágrimas azules de desamor. Se nos va la noche, déjame entregarte un nuevo corazón. Roto, remendado y vendado, seco y agujereado pero tan sincero que podría darte vida durante un siglo entero. No te amo y es una mentira que me sale tan bien, acércate y te lo diré por última vez.
Te prometería la tierra pero ya no sé por dónde comenzar. Permitiría que me uses para secar tus lágrimas aunque me vuelvas a abandonar, advierto que las despedidas no se me dan bien. Niña que no deja de llorar, niña que no ama ni se deja amar ¿Quieres saber cuánto tiempo más voy a estar?
Deslumbrando con su sonrisa de ojos tristes déjame pedirte una noche en la que no existan lágrimas.

No hay comentarios: