miércoles, 28 de marzo de 2012

Prendiendo tiempos

Estaba por prender el tiempo, pero perdí el fuego. Cuando volví de buscarlo ya había pasado demasiado y no pude recuperarlo. Paredes que sangran una perdida de tantas, y cuando te des cuenta siempre va a ser como si fuera la primera, porque el corazón se renueva y cada capa que quemas se vuelve a regenerar.
Llame al loquero y me dijeron que ahí no estabas, pero simplemente estaba buscando un lugar. Los amigos se alejaron y tan desolada quede, la luz se apago y la puerta se cerro. Volveré a no caminar de nuevo por ese lugar,  pero ahora ver las hojas caer me hace recordar cuando todavía estaban verdes y no me interesaba estar tan alejada.
Tire la moneda y reboto, como todo lo que digo. Mi alma estaba tan pobre que no la pude tirar en el río del desamor y un deseo se esfumo. Me engañe y un poco también lastime, quise sufrir y me salió bien. Cuando vuelvo a donde empece, de nuevo no puedo olvidar que a veces, un poco feliz se puede ser y sin querer vuelvo a verte detrás de cada pensamiento. Las habilidades de engañar y dar vuelta se me van, pero puedo recordar que nunca fui buena más que para hacerte gritar.
Ni un día o dos me van a hacer olvidar tantos atados de cigarrillos que regale, porque no, hay cosas con las que no se joden. Ni el más dulce de los chocolates, el más frío de los vodkas o la más oscura noche van a sacar de adentro cualquier sentimiento de desolación, mi cama esta vacía como siempre, la tuya también?
Apurarme a buscar el calor no me  convence y termina por aburrirme, sabes un poco puedo decir que no es mi culpa pero cuando me doy cuenta, caigo en que simplemente idealice algo que no es. Podría seguir viviendo de una ilusión que no mide más que yo pero ya la mentira se acabo y aunque quiera el tiempo se me escapo.

viernes, 23 de marzo de 2012

18 hs

Tengo la voz resentida de no cantarte, el cancionero cansado de esperarte y un buen sabor a pena amarga que tras las horas vuelve al rincón de la represión.
Si no pudiese ser un artista, prediría que me saquen de un arrebato la vida. Quien te llama y pide por los ojos que no me desean ver. Nuestra conciencia no se encuentra en el mismo canal y los ruidos que produce la angustia en mi pecho despiertan la ciudad.
La comida no me sabe, las alegrías se vuelven de cartón. Completos antros que me vuelven a acobijar en el invierno de un pobre que no tiene idea de na', disfruta la copa rota y vacía del mal momento emocional.
Vagos que atan con alambre las sonrisas forzadas de tu malestar. Tu, yo, vos, mi propia destrucción. La fiebre sube y el invierno que se siente en el cuerpo no tiene resistencia en los momentos de reflexión, donde el optimismo es asesinado cual libertador revolucionario en tu inquisición.

Madrugadas

Unas noches pienso en vos, otra no, aunque lo intento no puedo recuperarme del agujero negro que dejaste en mi interior. Un te quiero y adiós.
La pasión con la que me siento morir, la intensidad con la que me despedazo por dentro cada vez, es lo más hermoso y real que cualquiera pudiese vivir.
Gotas caen alrededor de mi mirada hacía vos y tu perspicaz puteada y rencor me dejan saber que existo, que siento y que aún vivo.
Cuando te enojas me gusta más, el ser destructivo se apodera de to'. Las tormentas que tus ojos provocan, resuelven un hecho que os da razones para que sin querer queriendo hacernos daño. siga insistiendo en esta lucha por vivir. Felicidad de encontrar las cartas sobre la mesa, altas horas de la madrugada y algunas maldiciones gitanas que en canciones envuelven una imaginación que no para de crecer, un corazón que no deja de bombear y esa lagrima que esta por evaporar.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Habitaciones y corazones

Con el corazón acongojado y algunos centavos me devuelvo a las calles sombrías que tantas veces me refugiaron del dolor. Empaño las vidrieras que me rodean por si llego a ver tu reflejo, no quiero solo te digo. Ni tantas molestias me tome, tomaré o lo que pueda permitir volver a realizarme cuando pienso y solo me digo que no quiero ni un poquito de este camino. Vaciando las hojas y buscando entre recuerdos molestos que me impiden recorrer, desencadeno en el más angustioso clima de angustias. Perdedores de sueños y vencidos carentes de esperanza me tiran una ficha para que no vuelva, nadie desea que vuelva. En mi imaginación recreo sin fin de momentos en los que todo resulta ideal, que lindo sería no tener que ser yo.
El suelo se alza en fuegos eternos, llegan hasta el techo. Las ventanas explotan y todo es color carbón. Puedo ver en el fuego retratos de lo que alguna vez fue esa habitación, quemada y fundida, hecha cenizas. Esa habitación soy yo y digamos que un poco el fuego ya me toco.

jueves, 15 de marzo de 2012

Fragmentos

Todos los fragmentos tienen sentido y el orgullo se me escapa por debajo de la mesa. Pa' que quiero otra más si con ninguna suficientemente problema hay. Sigo presa en los confines de mi mente, pero la brisa fresca me devuelve la conciencia. Los demonios van detrás de mi y no puedo vivir, en el tejado tendré que resistir.
Las sabanas se tiñen de negro y el luto perdura cual estación del año, inviernos fríos me invaden. Mis épocas pasaron y las extraño, pero más lindo recuerdo no podría tener.
Apuñaladas se asientan en mi cuerpo y más doloras se vuelven cuando me resisto al poder de tu ausencia. Cuantas noches deberé soportar este castigo impuesto por esas cosas del destino, de la vida. Tal vez mañana sea mejor, me pregunto cuantas pruebas se atravesaran para por fin librarme o al menos aliviarme.

sábado, 10 de marzo de 2012

Perdida

Los muros me encierran, declaran mi soledad un hecho sin vuelta atrás. Un grito ahogado muere en el pecho de la libertad perdida. Los libros y papeles se convierten en una cueva, un refugio que termina dejando los pensamientos más profundos en un estado de aislamiento total. Los rayos del sol queman  la piel y ahogan las penas rogando por una luna llena de verano que  emprende su final para volver al nublado otoño llenando vacíos con sus lluvias.
Morir al mismo paso que las estaciones van avanzando en el calendario la profecía de cada año. Los destinos forjados ilusos de escapar logran envolver la locura en tu interior y sacar los peores malestares.

Mis gritos ahogados van a resonar en las paredes de mi conciencia hasta que vuelva mi cordura.

Te amo, te odio, te anhelo, te deseo, te necesito y deseo que me necesites.

domingo, 4 de marzo de 2012

Droga

La mayor parte del tiempo se miente de una manera inconsciente creyendo tener una fortaleza inexistente, la parte restante del tiempo se la pasa admitiendo el nombre de su debilidad. A fin de cuentas, tu debilidad es la única fortaleza que tienes. El miedo a perderle es lo que te vuelve completamente vulnerable. Es tanto el deseo de que esa completa dependencia sea reciproca que nubla el panorama y no te deja avanzar.
Los días cerca y las noches lejos te debilitaron más, momentos oscuros en los que se cae más profundo de lo esperado, momentos en los que simplemente la adicción saca lo peor de una persona.

Cuando te tengo, soy tan feliz. Cuando te tengo nada ni nadie me puede hacer daño. Cuando te tengo nada es suficiente, quiero más, siempre quiero un poco más, lo suficiente como para pasar noches lejos sin morir lentamente. Aún si me fueras consumiendo lentamente hasta desfallecer, sería feliz.

El desagrado y odio que genera es solo producto de la propia impotencia de estar lejos y de no ser lo que quiero, no valer lo que deseo. Simplemente soy tan egoísta que quisiera ser el primer y también el último pensamiento.