lunes, 26 de septiembre de 2011

Eso, eso

En las deshoras encuentra el nido de la serpiente en que se ha convertido. Nunca baja de la gama de los verdes y se arrastra con su suave piel entre los desdichados mortales. Incluso peor que la propia semilla de la discordia, logra que naciones enteras entren en guerra. Le han llamado Helena algunos y otros Rigoberta. Poco importaría si fueras vos, si fuera él o si fuera yo.
Conteniendo las ganas de lavar las palabras alguna vez ensuciadas y gastadas, poco queda por hacer. Indelebles son las manchas que ahondan en una historia, como la de nunca acabar.
Mientras se repiten una y otra vez las palabras de un inconsciente duro como el concreto, parte y reparte a quienes conformen esta inocente locura llamada juventud.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Incluso

Aunque me desangre y el musculo deje de bombear, no sucumbiré ante tu redención. Incluso si mis rodillas se desgarraran ante tu imponencia fría como una esmeralda, no me arrodillare. Incluso jurando y perjurando carecer de orgullo, planeo no quedar sumergida una vez más en el mar de los desamores, ahogándome en lagrimas con sabor a sustancias.

sábado, 10 de septiembre de 2011

Sol

Vulnerable al tratarse de vos, y débil al punto de la idiotez... pretendo seguir siendo egoísta al decirte que te quiero, me vuelvo loco ante tu imponencia y me resigno aunque mi terquedad por cariño me insista a debatir.

Mi sol, mi sol personal qué nos ha pasado? Palabras tan hermosas nunca antes se dirigieron a mi, hasta que llegaste. Creer que más de un año pasaría de esas palabras, mil vivencias y peleas. Como pensar que la única persona que alguna vez sintió algo verdadero y sincero por mi, me dejara al contrario de todas las otras veces. Pecaste por tu bondad oculta entre una coraza de mentiras y sustancias. En ningún momento dejaste que tu luz se apagara y puede que tus rayos me quemaran la piel, pero a fin de cuentas sanaron nuestras heridas.
Te extraño.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Horas

El encanto enceguecido por el contar de los minutos que ruedan por tu autopista de pasiones perdidas. Conducen a la mera desesperación empañada en finas gotas de aguanieve flagelando tu paciencia. Rogando a dios y todos sus arcángeles el cambio de estación te enredas en una carrera sin fin, como la historia de nunca acabar. Adyacente a tu dolor pasado registrado por el enemigo sin fin destacas la hora de partida para luego desaparecer entre la niebla de mi inconsciente. 

jueves, 1 de septiembre de 2011

Salvaje, oscuro, instintivo

Con el corazón acongojado entre tus suaves manos siento como si lo retorcieras cada vez que escucho tu nombre en la lejanía. Hasta las lagrimas de dolor y sangre llego al pensar que todavía no puedo dejar de sentir ese dolor entre lo más profundo de mis entrañas. El golpe arrollador que se asemeja a una estampida de toros salvajes me aplasta cada vez que te nombro, cada vez que te pienso.
Increíble poder notar que con vos era de esa manera. Salvaje, oscuro, instintivo. Eramos cuales animales en celo  pelean y gruñen, compiten y se desgarran buscando ser el más fuerte, quien que cause la herida más profunda.