Calles

Luces que enmarcan rostros desconocidos encajados en un mar de desesperación. Congelados por el sonido asesino que desprenden sus cuerpos encendidos que vagan por el limbo del temor. Sudor, muerte, espirales sin control. Rondando por los caminos del azar, se desfallecen nuestras extremidades hambrientas de dolor. Eclipses que duran segundos nos enseguecen y ya nada se puede decir o hablar.
Detrás de tu movimiento continuo me respaldo para respirar. Necesito más aire y mejor aún si es de a dos.
Creando caminos de desesperación buscamos la muerte en una copa de dolor. Arde, se desprende y vuelve a arder. Continuamente corrompe tu mente, la mía y la de ella. Somos uno. Direcciones diferidas, calles entrecruzadas y fines que comienzan alrededor de un yo.

Ron dorado

El vaso con ron se volcó pero como eras el barman lo rellenaste nuevamente. Limpiaste la barra pero igual de sucia quedo. Y sí tanto te pesa el volver a recurrir deberías alejarte de todo. Encerrándote en un cuarto sin ventilación con un poco más de ron. Y aunque estés totalmente ebria te quiero.
No me digas lo que no quiero oír y dame un poco más de tu atención. Quiero sin más motivos que desprenderme de tu inconstancia con ese peligro que recorre las venas cada vez que me alejo de vos.
Suponer no es cuestión de tiempo, cuando las prisas abundan en colores. Cuanto peor es más me enajena y no quiero regresar. En este momento quiero irme ya y dejarte sin más.

Semidiós

¿Y si quisiera que me presiones? Cuando desearía que me arrancaras del pozo y me mandaras a volar por ahí. Si la soledad te consume en una noche cualquiera, porque si es de día no se disfruta tanto.
Se desarma y vuelve a armar, encajando cada parte en su lugar. Vuelve, se va.
No sirve de nada la perdida, si al fin y al cabo solo es tu reflejo. Por más asqueroso que sonara, los colores son más bellos cuando se disfrutan de a dos ¿Pero qué? ¿Demasiado para el orgullo que te conforma? Tanto de semidiós que terminas en un rincón mientras los mortales disfrutan de su vida, de la ignorancia.
Si ellos son felices, ríen y disfrutan! Pero, ¿te gustaría ser como ellos?

Podría creer que no son quienes creo que son, que maduraron, que ya son grandes y no siguen con lo mismo de hace meses, pero simplemente me resulta imposible. Tan obvias van a ser? Tanto quieren demostrar que no tienen vida y no pueden superar ciertas cosas? Ni que hubiera estado de novia con las dos! Vamos, se que no tienen en que ocupar su tiempo, pero no creen que es hora de que se dejen de joder?

Un besito para ambas y para sus novias que bastante descuidadas las deben tener si pierden tiempo en mi.

Tres

Una calada más profunda que la otra y vuelve a repetir. Con las cenizas en la mano y el fuego en la garganta se deshace de las sensaciones que inundan este cuerpo.
Corre por las venas y se asienta en el corazón. Deja un espacio en blanco y viene un espasmo. Agonía de placeres impuros vienen de distintas maneras. El llanto que te ahoga el pecho se quedo arrinconado y guardado.
¿Y si dejamos esto para después? Yo doy la vida por saber que te corre por las venas.

Denuncia

Tan inconstante puede volverse eso que añoras al punto del desinterés. Hartos de la búsqueda externa, sus jóvenes priorizan algo más profundo. El desinterés de las masas consume sus almas en pos de buscar una nueva razón de ser. Exhaustos antes el mareo continuo su pensamiento se eleva sin limites.
La luz y junto con sus sombras abundan en esos corazones llenos de ingenuidad. Blancos como el papel se sumergen en aguas completamente ennegrecidas por tu concepto de sociedad.
Hipócritas, HIPÓCRITAS! Andan por sus callecitas comulgando la igualdad cuando solamente buscan joder cada paso que das.

Dos

En una baraja se definió el destino que debí seguir. Como se debe sentir cuando te clavan un puñal en el centro del estomago. Como corre tu vida frente a tus ojos. Cuando no es sangre lo que cubre tu cuerpo, sino dolor. En el momento en que esos fantasmas salen para apoderarse de tu vida, de tu pasado, de tu presente, ahí  te encuentran retorciéndote en una esquina de la habitación.
De repente, no dolió más. Corriste, corrí, corrimos por la capital de los sueños rotos, de mis fragilidades ocultas. En cuanto lo recordé, no pude dar vuelta atrás y gire alrededor de un pozo al cuál me negué volver a caer, por lo menos con vos.

Corazón

El tiempo pasa lento y cada vez se va desarmando más este esqueleto con corazón . Consumido como un cigarrillo de media tarde, sus cenizas se las lleva el viento. Se sale de los cabales dejando de recordar para buscar un escondite en la oscuridad.
Pasa del calor al frío en una sola pitada, respira y tose. El universo se para y vuelve a girar como una calesita. Es mi corazón!? Pues, no para de bombear. Te veo y quiero más, no de vos, de ella.

Uno

Deseos carnales que ya no fueron ni se cumplieron rondan por una mente hastiada del cansancio y vacío existencial que produce una ausencia física. Concentrada en el fuego de muchas pasiones acumuladas recibo el suave ardor de la espera.
Ante tu sonrisa me desarmo y ardo bajo esa mirada inocente pero corrupta suavizada por ese encanto natural que me lleva al infierno de los recuerdos.
Difíciles de captar podrían ser las sensaciones que se apoderan después de cada palabra. Encerradas en tu caja de cristal podrían permanecer, sin dejarlas salir siquiera al amanecer.
Adentro tuyo.

Marfil

Cuando las costillas dejaron de quebrarse y el dolor ceso pude levantar esa estructura de fino y brillante marfil que danzo alguna vez ante mi. Como si pudiera contar las mil maravillas que alguna vez vi en tus indefensos ojos. Siempre cuestione el porque de mi desagrado ante tu mirada llena de debilidad, nunca me creí el engaño falaz del brillo que destellaba ante la luna llena de verano.

Es recurrente el pensamiento de que ya no es más, poco a poco cae en el pozo de los olvidos. En la caja de recuerdos que alguna vez pedí, junto con los abrazos rotos por la imponencia del cielo recubierto con suaves mantos de humo que desprendían tus labios una noche a las 3 am. 

Y que ya no soy, que ya no seré como debí en cuestión de tiempo y espacio. Cubriéndome con mis sabanas me despido y te digo adiós. Labios, cuello y costillas. Espalda, manos, columna y alma.